jueves, 12 de abril de 2012

Tener hijos es tener imaginación!

Estuve en Buenos Aires para Semana Santa, más precisamente en la república de Lanús. Con el único objetivo de reunirnos con el señor padre de estos niños, y pasarla bien los cuatro juntos. Ni hablar que las casi once horas de viaje de ida, más las once de vuelta con los dos niños no fueron lo más parecido a un viajecito de relax. Pero bueno, son tiempos de sacrificio y de siembra (dirían varios, entre ellos mi marido), ya llegarán esos tiempos, en los que tendré suficiente dinero y horas de ocio, como para dedicarme al sano relax. El problema es que voy a ser una vieja chota. Ja. Pero no importa. Disfrutemos igual este tiempo de valijas siempre abiertas, de niños que saltan, chillan y reclaman, del mismo modo en que te dan los más lindos abrazos y te deleitan con su ingenuidad. En fin, de dulce, delicioso caos.
Ayer me topé otra vez con este post (en inglés), y lo copio acá porque me encanta cada vez que lo leo. Es una visión distinta (de un hombre) sobre el tener hijos o no tenerlos, y sobre el argumento de "ser egoístas" que esgrimen muchos que deciden que "no están listos/preparados" para tenerlos. Me encanta eso de pensar que ya el solo hecho de pensar en tener hijos es tener capacidad de imaginación; para imaginarnos transformados, en otra unidad.
Dejo fotos, el tiempo vuela, pasa tan rápido... que al menos aquí, dura un poquito más.