domingo, 27 de enero de 2008

Los amoooooooo!!!!



Uy, cuánta emoción junta, encontré fotos en la compu que ni sabía que tenía: las que Pablo sacó con el celular el día que nació Emilio! Cuánta fragilidad, cuántos miedos, cuántas sensaciones reviví con esas imágenes. Qué chiquito que era mi bebé, que coloradito, todo peludo, un cachorrito indefenso, puro instinto, pura necesidad. Imposible describir con palabras esos primeros momentos. Todavía recuerdo las ganas de llorar que me dieron cuando traspasé el umbral de la clínica y tenía que sacar "al mundo" a nuestro hijo. Gracias mi amor por haber estado ahí, de la mejor forma posible; gracias por haberme regalado este angelito, gracias por sorprenderme sin quererlo (y eso que también sin querer borraste el video de la cesárea! pero te perdono igual). Tenía pensado hacer otro post, pero creyendo o no en las casualidades, me topé con esa catarata de amor, y ya basta, sólo quiero dedicarles este post a mis dos hombres. Gracias por hacerme feliz.

martes, 22 de enero de 2008

Dudas existenciales

¿Alguien me puede decir cómo se hace para tener "una vida" con el crío que pide teta cada dos horas?
¿Y si después lanza como un cerdo, toneladas de leche cortada, y no hay guardarropas ni lavarropas que alcance?
¿Y si para evitar el malestar del bendito reflujo hay que tenerlo en pie durante al menos media hora? A mí las cuentas no me cierran... media hora para dar la teta, otra media hora para hacerle el famoso provechito, otros 15 minutos para cambiarlo cuando se caga, o se vomita, o ambas cosas... además que hay que enjuagar todo, porque el lavarropas hay manchas que NO SACA, y ya prácticamente se hacen las dos horas, m'hijo.
(Basta ya, deje de gritar, señorito, que no sé más que hacer!)
Y eso que es de día... ni les cuento anoche que me tuvo hasta las tres y media con toda esa seguidilla de eventos... divertidísimo.
(Gracias hijo, ahora me vomitaste toda la ropa a mí, otros 10 minutos!!!).

jueves, 17 de enero de 2008

Italia, vieja y querida...

Sinceramente, en estos días me estuvo deprimiendo un poco vivir en este país. Una sensación que no experimentaba desde que dejamos Catanzaro para vivir en Cagliari. Será que en la Cerdeña se respiraba otro aire, el sol brillaba siempre (aseguran que en la capital sarda hay 300 días de pleno sol), los jóvenes eran alegres y... a veces realmente me parecía no estar en Italia.
Me está cansando un poco este pueblo de mammoni (mamengos), de eternos Peter Pan y Wendy (y eso que es uno de mis cuentos preferidos). Me pone los pelos de punta la situación de los jóvenes en este país, me dan ganas de zamarrearlos, despertarlos, decirles: "¡hey, la vida es ahora!" (sí, ragazzo, como la publicidad de la Vodafone, "life is now"!). Me da pena, me llena de impotencia su abulia, su comodidad, su falta de horizontes, sus pocas ganas de soñar!!!
Veamos algunos episodios y díganme su parecer:
- "Irnos a vivir solos, imposible!": Con obvias y pequeñas y honrosas excepciones, muchachos, la vida no es que la mamma nos cocine y nos tenga la casita limpia, hasta los 30, 35, 40 años... porque los salarios no alcanzan para irnos de casa, porque el mutuo (crédito hipotecario) cuesta una fortuna, y ni hablar los alquileres, que es "tirar la plata"... pero, digo yo, un poco de independencia, de vivir "tu vida", ¿no son motivo suficiente para gastar un poco de tu sueldo de neo laureato (recién recibido)? El 70% de los "chicos" entre 20 y 30 años viven con los padres.
- Y ustedes, ¿cómo hicieron? ¿cómo hacen?: Así como me cuesta entenderlos, a ellos, nuestros coetáneos, les cuesta entendernos. Entender que Pablo y yo vivimos nuestras vidas, solos, lejos de nuestra familia, desde los 18 años. Que viví en un departamento de estudiantes con amigas, con mis hermanos, hasta que me vine a vivir con Pablo. Que me recibí a los 23, y trabajaba desde los 20. Que me siento lo suficientemente "grande" como para ser mamá y esposa.
- "è piccolo!!": Me cuesta entender que a los 25 años, a los 30, se justifiquen diciendo que alguien es "piccolo"... "somos chicos todavía"... ¿Chicos para qué? Pablo lo ve en su ámbito, en el deporte, a los 21 años, los justifican diciendo que son chicos e inmaduros... cuando están en su momento de máximo rendimiento físico!!!
- ¿La culpa es del chancho o de...?: Que a los 12 años tu mamá te acompañe a la pileta, y después de mirarte la hora entera mientras nadás, te peine y te ponga las medias como si fueras un bebé... me parece que cualquier chico argentino huiría desesperado de semejante madre. Acá lo vi con mis propios ojos. Y no es un caso, son todos.
- Alergia: Y hoy, fue el colmo. Una conocida, docente, profesional, inteligente y comprometida, me dijo: "sé que te vas a reír, pero cuando llega el tiempo húmedo, a mi hijo le da alergia, y yo me meto en la cama con él para controlarlo mejor mientras duerme, porque si no, no estoy tranquila"... el niño, señores, tiene un cuarto de siglo, ni más ni menos.
- "Non ve lo meritate": Me molestan esas mujeres sabelotodo, esas madrazas italianas, ese monumento a la madre, la MAMMA, la NONNA, que te mira con ternura porque... "sos tan inexperta". Aunque no me lo digan, me lo hacen saber. La señora que vive abajo de casa, tendrá unos 90 años y la perdoné sólo porque le queda poco tiempo de vida. El otro día, como siempre, juega embobada con Emilio, le habla y me dice... "es demasiado lindo!! no se lo merecen!!" (non ve lo meritate)... QUÉ? CÓMO? QUÉ DIJO? Sí, nosotros, Pablo y yo, no nos merecemos a Emilio. Puede ser que lo haya dicho en broma, pero la crucifiqué, y sé en el fondo cuál es su razonamiento. Nos ve jóvenes, despelotados, que nos levantamos tarde (sí, pero el nene "demasiado lindo" nos da batalla hasta las 3 todos los días!)... pero somos sus padres!!! Y apuesto cualquier cosa a que crecerá más libre y feliz que todos estos MAMMONI!!!
En fin, estos son sólo algunos pequeños hechos aislados. Pero la Italia, el país en el que vivo por ahora, un país que aprendí a amar y a disfrutar, está TRISTE. Es la verdad. Yo lo presiento desde hace tiempo, y cuando terminó el 2007, un artículo del New York Times se encargó de propagarlo por el mundo. Y a los italianos les tocaron el amor propio, porque convengamos que no es lo mismo tener una ligera sospecha de que sos un país viejo y atrasado, a que te lo diga el gran diario yanqui.
Y ahora, para completarla, además de vieja, la Italia está cubierta de basura... pero así y todo, la quiero. Ojalá reaccionen a tiempo.

martes, 8 de enero de 2008

Casteldelmonte (mini crónica)



Ya saben que salgo poco. Hace frío, nevó, y el niñito tiene una salud de fierro, pero tampoco es para hacerse la kamikaze. Yo insisto, hay veces que necesito como el agua ver un poco de SOL, respirar AIRE de la calle, y no este microclima calefaccionado de mi casita. Pablo dice... "¿adónde querés irrrrr? con el frío que hace y el bebé chiquiiiitoooo!!", pero bueno, mis hormigas en el culo son más fuertes, y el chico se tendrá que acostumbrar.

Así que, de vez en cuando, salimos a pasear.
Estamos en Puglia, una región de Italia que no tiene desperdicio. Ya lo he dicho antes, Italia es toda bella, no hay nada que hacerle, cada región tiene su encanto, y para mí es un pecado no tratar de descubrirlo.
Cuando vinieron Teby y Lu, para Navidad, los tuvimos bastante encerrados en casa, pobres. Y me parecía que no se podían ir sin hacer al menos algo de miniturismo. Así que, el último día, partimos hacia Casteldelmonte, a quince minutos de casa. Con frío y niebla, pero allí estuvimos. (Verán que las fotos parecen sacadas en Escocia, jeje, pero no, es la Puglia, supuestamente una tierra donde reina el sol!!!). Casteldelmonte es un castillo medieval del siglo XIII, integra la lista de sitios protegidos de la UNESCO, realmente un paseo muy lindo. Todo el edificio fue reestructurado el siglo pasado, respetando cómo era antiguamente, así que está hecho una pinturita. Está muy bien cuidado, y señalizado. Dentro del castillo cuentan toda la historia, como suelen hacer en este tipo de bienes culturales en toda Europa. Si les interesa, les cuento que era parte de las residencias de Federico II, un monarca muy importante que por aquella época reinaba en todo el sur de Italia, desde Sicilia. Debe ser una historia interesante la suya, pero por el momento no sé más que esto.
Emilio, por supuesto, se portó súper bien. Estoy en la duda todavía si será intelectual o deportista, porque cuando vamos a la cancha también se muestra muy interesado!!!

viernes, 4 de enero de 2008

Resaca de fiestas

La mesa de Navidad: antipastos.


Les debía los comentarios de las fiestas... pero tenía resaca.
No de ésa que dura hasta la noche del día siguiente, no de ésa causada por las varias copas de champagne, o los litros de cerveza. No no. Ahora, con el crío, la resaca es distinta. Es resaca de cansancio, de falta de sueño, de "neo mamma", de "neo casalinga" (léase: mamá primeriza, ama de casa inexperta). Sobre todo cuando la pequeña familia tiene una vida social bastante agitada. Resaca social, podría decirse.

Primero, para Navidad vinieron amigos argentinos, Teby y Lu, una pareja, él es cordobés y también jugador de básquet... digamos, están en la misma que nosotros. Se quedaron una semanita. Divinos, me ayudaron un montón con Emilio, con la casa, y todo... pero quieras o no, una se cansa...

La Nochebuena estuvimos acá en casa (bueno, Año Nuevo también, se convirtió en un resto-pub-hotel para las fiestas nuestro hogar), con estos chicos, y con un compañero de Pablo brasileño Paulinho, y su mujer Bárbara y su hijito, Felipe. Cada uno cocinó algo, y la pasamos muy bien. Terminamos la noche jugando a las cartas, al UNO. Dicho sea de paso: para tener en cuenta, Bárbara trajo un Salpicão carioca, un salpicón, muy bueno! Lleva pimiento, manzanas ralladas, choclo, pollo, zanahorias también ralladas, uvas pasas, y todo condimentado con mayonesa y yogur magro. Ellos, en Brasil, lo comen con papitas fritas bien finitas arriba. Queda bien el contraste. ´

Lu y yo aportamos la típica ensalada rusa, después un pollo al champignon, y panqueques (los ya famosos) de postre.
Para el Año Nuevo mis niveles de estrés subieron bastantito... prácticamente todo el equipo de Pablo en casa... mamma miaaaa! Y acá estamos hablando de varios italianos. A mí me hablan de que vengan italianos a comer a casa y ya me estreso, porque son muy rompe con la comida, muy estructurados! Pero con Bárbara, como buenas latinas, no nos complicamos y enseguida tomamos la delantera ofreciéndonos a hacer lo que nuestras humildes manos podían para el "cenone": por mi parte, lasañas, matambre arrollado (salió duro, bua!) y cheese cake (ya se los puse en el post anterior, perdón, pero estuve un poco traumada, je), y Barbi, el famoso salpicón, un carré de cerdo espectacular, y mousse de chocolate de postre... todo buenísimo. Las italianas la verdad, se la tomaron tranqui, una las bebidas, otra los antipastos, y una tercera las lentejas y un estilo pastel de papas (esa trabajó un poco más).

Mesa de Año Nuevo: parte del batallón.

Al final todo salió bien (exceptuando el matambre que estaba duro como una piedra, pero bueee, me salvó el carré de Bárbara), y sobró un montón. Así que la sucursal de la "fonda del pinchazo" (como le dice mi abuelo a su casa cuando nos instalamos pensión completa ahí) estuvo abierta todo el primero de año: almuerzo mitad del batallón, merienda incluida, y cena la otra mitad... yo agotadísima, en el medio tenía que entregar las páginas ("los diarios no tienen feriados", si habré escuchado esa frase de mi jefe!), Pablo lavando pisos (cómo será que me habrá visto cansada), y Emilio feliz como siempre, cuando hay joda él está chocho de la vida!

Para concluir, a medianoche cayeron... chan... los hinchas del equipo!!! Hubieran visto mi cara cuando los veía pasar, uno, dos, cinco, ¡¿cuántos?! Un poco más de respeto cheeee! Esto es una casa de familiaaa!! En fin, que terminé el primero de año haciendo café para ocho, lavando platos de diez, y partida en mil pedazos!!

Ahora estoy haciendo cura de tanta sociabilidad, recluyéndome en casa y leyendo blogs! obvio! ¿me estaré volviendo ermitaña?


¿Ya se fueron todos?