sábado, 29 de noviembre de 2008

viernes, 28 de noviembre de 2008

Basta ya!

Que la gente ésa llena de neuronas que son los informáticos se dejen de inventar programas como blogger, facebook, flickr, etc, etc. Caso contrario voy derechito al divorcio. Y al desempleo total también.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

los últimos veintipico!

Hoy vendría a ser esa fecha en la que conmemoro el día que vine al mundo.
No sé por qué (o sí, será que la maternidad cambió mucho mi visión de las cosas), siento que la verdadera homenajeada en este día, debería ser mi mamá, que tuvo la paciencia de esperarme, de ir al sanatorio... ¿cuántas veces, vieja? al menos tres. Y esperar. Esperar. Porque me hice esperar tres semanas desde la fecha estimativa. Y ella súper paciente, súper buena madre, ya desde la panza. Y llegar allí, al Italiano de Rosario cuando ya no daba más, después de esperar -también- a mi papá que "quería terminar de comerse el durazno" porque parecía un amague más. Los imagino luego, acelerando el fitito a toda velocidad, bancándose los adoquines de bulevar oroño, mi papá equivocando alguna marcha, seguro. Y luego llegar, no entender a las que gritaban agarrándose de las paredes. Ella así, tranquila, estoica, con esos relatos de sus cuatro partos que me hicieron creer que yo también traería los niños al mundo así, con esa facilidad.
Así que... gracias a ella, mi mamá y gracias a todos por los saluditos!
Anoche el festejo comenzó bárbaro y hoy espero que siga así. La cena les encantó, y comimos torta, Pablo me dio el regalo a medianoche y nos dormimos todos incluido Emilio, a la una y media. Hoy los festejos siguen!
Y hay que despedir bien esta etapa... estas serán las última velitas con un 2 adelante que apague!

martes, 25 de noviembre de 2008

Misión imposible

- Tengo unas vecinas muy piolas. Son dos señoras, una es mi vecina de enfrente, la otra vive dos pisos más arriba, pero hace una vida que viven en el mismo edificio, comparten el cafecito de después de almorzar, paseos de sábado a la tarde, puchos en el balcón a cualquier hora, y criaron a sus hijas juntas. Una amistad hermosa, algo que -y a veces mirándolas me angustio- extraño, y a veces temo perder en este vaivén.
- Sus hijas tienen mi edad.
- Por eso mismo, ambas prácticamente "me adoptaron", cuando me vieron "tan chiquita" y con un bebé, y sin madre, desamparada en una ciudad nueva, je.
- Emilio se enloquece con ellas. Con las señoras y con las hijas.
- Me han invitado a almorzar, me ayudan con Emilio, me invitan café.
- Y esta noche (vísperas de mi cumple!) las invito yo. A casa. A las cuatro. (Pablo hará de mozo, no sé, ja).
- Como siempre, el gran dilema de qué cocinar. Cuando habíamos ya decidido, unas tartas de entrada y después carne argentina, una de las señoras me toca la puerta diciendo que una trae los antipastos, la otra una torta de postre y que carne ni se me ocurra, que tienen problemas en los dientes y una de las hijas odia la carne. Pero que haga "algo típico argentino".
Y hete aquí, luego de toda esta enumeración, el grave problema: ¿algo típico argentino sin carne? ¿cómo? ¿qué? Estoy devanándome los sesos y realmente, no se me ocurre ningún plato sustancioso y rico sin carne, que sea típicamente argentino!!! (un locro vegetariano??). Por el momento, haré tarta de choclo y un pionono. Eso, siempre que lo he hecho, me han dicho que es algo nuevo para los italianos.
Maldita cocina "fusión" que tenemos en el país que me parió!

viernes, 21 de noviembre de 2008

Olor a invierno

Frío, húmedo, que te cala los huesos, que impregna cada cosa con su frescura gris, pero hermoso al fin. Me gusta sentirte, cuando llegás así, definido. Me traés recuerdos de otros tiempos, en que con la bici desafiábamos el viento en contra para llegar al club. O cuando corría los metros que me separaban del cole, para llegar temprano, y a veces volvía sobre mis pasos. Porque me olvidaba un cuaderno, un libro, los papeles glacé. Y al final de nuevo llegando casi tarde, maguita, otra vez. Frío, frío, un frío gentil pero marcado, como el de los desfiles de 25 de mayo, en el que las eternas medias tres cuartos fallaban en su intento de apaciguar el temblor de esas piernas cada vez más largas, cada vez más flacas. Pero sobre todo frío de smog, frío de humo, frío de las siete y media cuando la noche recién se despedía. Cuando clary me esperaba abajo, y cómo hacés para fumar a esta hora, caminar casi correr quince, veinte cuadras, cuántas eran, atravesar ciudad universitaria creyendo haber dejado la fiaca por el camino. Y a veces no, la cabeza igual se nos caía de sueño. La nariz congelada, camperitas de jean, siempre esquivas a los abrigos gordos, mi mamá me ofreció el gamulán, a lo mejor lo reformo y lo uso. Frío de nuevo, frío húmedo, frío que se huele y se entremezcla en los recuerdos con aquel penetrante aroma del querosén, con las estufas repartidas por toda la casa, con esas bolsitas chorizo de arena abajo de la puerta para evitar que se cuele el vientito sur. Cuántas sensaciones te puede traer abrir la ventana un día gris, a las siete de la mañana. Un despertar de los sentidos, un despertar de la nostalgia.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Letras sobre papel


El fin de semana tuve una de esas sorpresas lindas y extrañas en el mundo hiper digitalizado, super acelerado, ultra racionalizado en el que vivimos. Fue media sorpresa, en realidad, porque de algún modo esperaba este momento, como parte del proyecto que ya les conté: ¡llegó la postal de Flor, de Menorca! Es de un pueblito llamado Fornells, en esta bella isla del Mediterráneo. ¡Gracias, pionera! Y gracias al correo de Menorca, que parece que es uno de los mejores del mundo, tal como sentenció Marce.


Por mi lado, después de una intensa búsqueda de postales más o menos decentes (dije más o menos, eh? definitivamente, o era muy viejas, o el buen gusto no caracteriza a los tanos del sur) para enviarles al resto de las locas nostálgicas que participan de este intercambio, llegué a juntar doce. Traté de que fueran todas de Caserta, la ciudad en la que vivo, que no tiene muchísimos atractivos, pero sí un par bien definidos: la Reggia (uno de los palacios reales más grandes de Europa, que rivaliza incluso con Versailles) y Casertavecchia, la ciudad antigua. Bueno, no digo más nada así no arruino la sorpresa.

Anoche me quedé escribiéndoles hasta las dos de la mañana. Me sentía como una vieja bruja participando de un antiguo y encantador ritual; una anciana hechicera resguardando un secreto elixir, queriendo perpetuar un milagro, el milagro de la palabra escrita. Escrita sobre papel.

¡Hoy mismo parten!

sábado, 15 de noviembre de 2008

Súper enchufada

(cuando me dejan)
sí, gracias, gracias a todas por entusiasmarse conmigo y aconsejarme y acompañarme en el sentimiento! estoy enchufadísima con el viaje, cada vez que puedo pongo TV5 aunque más no sea para que se me acostumbre el oído, y vengo, y trato de que ryanair esta vez no me cague, y me leo bien las distancias entre beauvais y parís, pisa y firenze, y mientras tanto trato de disimular el inevitable terror de viajar con el bebito sin el papá, aunque ahora ya es más grande, pero no sé, una se pone boluda, y también lidio con mis cuestionamientos internos de por qué no viajé más antes, cuatro años en italia y lo más lejos que llegaste fue roma... y bueno, sí, gracias a la buena voluntad de pablo y nuestros amigos casi hermanos, madrid, y gracias a la mala política empresarial de ryanair y al mal tiempo en girona, también barcelona. Y basta.
Ahora ando tentadísima con scones, hace ya más de una semana, pero no encuentro "la" receta, ésa del recetario royal bendito de mi vieja, ése que se hacía pedacitos, de lo gastado que estaba el papel, pero qué buenas recetas tenía. Encontré una similar en internet, voy a ver qué tal sale porque es sábado a la tarde, llueve, emilio está medio pachucho y con noches de fiebre, así que... (seguro que alguna de ustedes brujas me va a pasar la buena, lo séeeee, también vos mami, si me leés, pero no puedo esperar!). Ya marchan los scones, calentitos, con manteca, mermelada, miel! y sí, esta vez el té negro solo para acompañar queda más que bien!

jueves, 13 de noviembre de 2008

¿lo digo o no lo digo?

(parafraseando a la mítica Chiqui...)

Viste cuando algo es tan lindo y tan soñado y esperado, y siempre parece imposible, que por las dudas no lo decís. Es tan frágil que con sólo materializarlo parece que se rompiera. Pero bueno, ya está. Ryanair me puede cagar, imprevistos puede haber, pero el pasaje está comprado.

Estoy planeando un mini viaje a París, pasando por Pisa y Florencia, con la mamá de una amiga argentina... no se podía volver a Argentina sin pasear un poco, no? Y si no se anima a ir sola, aquí estamos para acompañarte!!!! Aparte, pequeño detalle, no conozco ninguno de esos lugares.

Ufff... lo dije!

lunes, 10 de noviembre de 2008

Weekend de eventos insólitos

Los fines de semana suelen ser bastante rutinarios en nuestra vida. Y podrían clasificarse en tipo A: Pablo juega de visitante; y tipo B: Pablo juega de local. Los domingos tipo A me la paso sola, él parte temprano, a veces tengo alguna que otra invitación a comer, o a la tarde me doy una vuelta por la casa de mi amiga, también ella mujer de estos maridos de domingos ocupados. Los tipo B suelen ser un poco más estresantes, hay que levantarse relativamente temprano, para desayunar bien, dar una vuelta si está lindo el día, almorzar temprano alguna delicia tipo pasta en blanco, arroz en blanco, algo de ensalada, luego el hombre se reposa, a veces me acepta alguna torta de manzanas casera y a las cuatro ya se va a la cancha. Yo voy más tarde para evitar peleas, apurones, y aparte, para no comerme allá dos horas antes de que empiece el partido.
Este fin de semana era de tipo A. Y así, como para sacudirnos la rutina, sucedieron dos eventos insólitos, dos hechos completamente inesperados.
El sábado, el señorito Little Walker dio cuatro o cinco pasitos solo, y no lo hizo una vez, sino tres!!! La primera, obviamente, como no había testigos, "no cuenta", me dijo el padre (mentira, de pura envidia que no lo vio él). Estábamos en el pasillo de casa, Pablo en la piecita de la computadora con la puerta cerrada -porque si no se vuelve loco el susodicho con el coso éste, el verdadero amor de su vida- y lo alcé del piso por enésima vez, pero en lugar de tomarlo de las manos, lo apoyé en mis rodillas, también porque venía cargando el fuentón con la ropa para colgar, cierto, qué mujer abnegada que soy! Cuando se vio así, libre, el mocito enfiló hacia la puerta corrediza de la habitación de su amada, donde vio la luz prendida, y arrancó!! Cuatro pasitos solo, yo gritando, "Pablo, Pablo, camina, abrí la puerta!". Y no, no llegó a tiempo para verlo. Sorry, si estás lento de reflejos no es culpa mía, ni suya, pobre ángel. Yo vi su primera vez! y vos noooo!!! ;)
El segundo evento insólito, quizá más que el primero, fue que ayer tuve mi primera fiaca dominguera desde que soy madre. Saben qué? Dormimos hasta las 12!!!!!! Obviamente, porque era domingo tipo A, porque si no, hubiera sido imposible. Como siempre, mi hijito tomó mamadera a las ocho y media (también a las cuatro y media, como casi siempre), pero, como su madre tenía mucho sueño, muuucho sueño acumulado, se lo llevó a la cama, a ver si prolongaba un poco la fiaca... y sí... se produjo el milagro, no sé cómo, me encontré a las 11.30 con él a mi lado durmiendo como un angelito. Y ahí me quedé, otra media hora, gozando esa merecida, aunque ficticia y efímera, sensación de "ah, qué libre soy".

jueves, 6 de noviembre de 2008

Little walker

No se larga, no se larga. Pero entrena!!
Persevera y triunfarás! (como para seguir en tema, je).


martes, 4 de noviembre de 2008

Los dichos de mi madre

Cuando estaba en la facultad, mi amiga Clarita se me cagaba de risa cuando le despachaba, luego de una larga enumeración: "y la mar en coche"... o como recién me venía en mente cuando me encuentro al pedo metida en un montón de laburo (se ve que mi subconsciente funciona así, nomás, no hay nada que hacerle): "me metí en camisa de once varas". Una antigüedad total!!!! Ella hablaba de que había flasheado, que se había colgado, que éste era un copado, éste otro un grosso... y yo, nenita del campo, nenita de mamá, hablaba así, como mi madre!
Mi mamá evidentemente es una de esas mujeres que no pasa desapercibida en la vida de sus hijos. No es de esas madres ausentes, todo lo contrario. Cada uno de sus cuatro hijos lleva indelebles las marcas de su crianza. Y la amamos, la necesitamos, le giramos alrededor como la verdadera Reina Madre que es. Nos aglutina, nos acapara, nos llena de amor siempre, real y virtualmente, pero también supo, no sé cómo, cortar el ombligo a tiempo y ayudarnos a volar.
Si me pongo a hablar de ella no termino más, pero es así, mi mamá me marcó a fuego, y eso se nota hasta en el lenguaje y en la forma de pensar. Si no me equivoco, una vez Wishi había hecho un post parecido a éste y en su momento me dieron ganas de copiarle la inspiración "memeándola". Ahora, si alguien quiere memearse, están invitados.
(y si mis hermanos más memoriosos me ayudan con la lista, mejor aun).

A caballo regalado no se le miran los dientes.

Si de noche lloras por el sol, las lágrimas te impedirán ver las estrellas.

Esto está pasando a castaño oscuro.

Lo poco agrada, lo mucho enfada.

El trabajo del haragán se hace dos veces.

Si está/s enojado/a, tenés doble trabajo.

No se puede ser monedita de oro que a todos les gusta.

¿Sabés la historia del pastorcito mentiroso?

El chiste y su relación con el inconsciente...

Lo que se come con gusto no hace mal!!

El tango me deprime.

Tinelli es de última.

Xuxa es diabólica.

Limpiar te seca el espíritu (te juro mami que me lo dijiste).

Juego de manos, juego de villanos.


UPDATE!

Aporte de Angie:

La vergüenza es para pecar.

Como mierda al pozo.

No se siente, se piensa (en relación a las relaciones de pareja "estables").


Aporte de Anitaclara:

Sarna con gusto no pica.

Calavera no chilla.

El que con vino se acuesta, con agua se desayuna!!!!

lunes, 3 de noviembre de 2008